Que no te vendan motos, que tienes el garaje lleno.
Hoy volví a escuchar a otro de mis amigos, «excusar» a su «ligue» por tardar tres días en contestarle un WhatsApp y así, mucha gente que conozco, y ojo, quién no lo haya hecho alguna vez en su vida, que levante la mano, porque yo misma en su momento yo fui la primera en hacer este tipo de cosas
, la especialista en idear posibles alternativas que me convertían una y otra vez en el último mono. Antes de desarrollar el porqué «el excusar» es simplemente una manera de auto engañarnos a nosotros mismos, me gustaría contextualizar lo siguiente:
- Las personas no tienen porque estar 24/7 atentas al teléfono 📞.
- Las personas tienen derecho a «tener vida» y no a convertirse en esclavos digitales.
- Hay tiempos razonables, es decir, no es lo mismo, una hora, que 3 días o un año ⏰.
- Los reclamos como si estuvieras loc@ no sirven para nada y solo te hacen sentir peor.
Una vez dicho esto, creo que es entendible por tod@s aquello de que «El interés se nota» y sobre todo:
Hay que tener claro que la No respuesta, también es una respuesta. Deja de auto engañarte.
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Vivimos en una era digital, en la que todo está a un solo click, pulsas un simple botón y la respuesta es inmediata. Cuando una persona, no contesta en un plazo considerablemente aceptable y sobre todo razonable, es simplemente porque no tiene interés, o el interés no es igual al tuyo. Basta de escusas, de parchear situaciones, de inventar, de conformarse.
Entonces, madreeeee, vivimos ese momento en el que te das cuenta de que «está en línea ✅ « y no, no aparece en ningún momento el ansiado «está escribiendo…» ¿¿WTF??
Y es justo ahí cuando aparece esa montaña rusa de sentimientos que van desde la incomprensión, la duda, el enfado, los celos, etc. Revisar de manera compulsiva si está conectad@ de nuevo, las miles de preguntas que ahora pasan por tu cabeza ¿Estará hablando con otr@? Tal vez sea con algún amigo, ¿Su ex? etc, etc

Si está en línea después de 2 días (Porqué si amig@s, cuando ansiamos una respuesta es inevitable comprobar una y otra vez, si la otra persona ha leído o no el mensaje, si está conectado o si te ha dejado en visto) y No te ha contestado, aceptémoslo, es porque no quiere, no le sale del corazón o no le sale de otro lado, está en otros business, es duro, pero es así. Hay una viñeta buenísima de la artista Flavita Banana que dice: ¿Te escribe o te contesta? y en este caso concreto ni uno ni lo otro, entonces, hay que aceptar, pero no desde el deseo de venganza, con la intención de devolvérsela en cuanto puedas, volverte loc@ subiendo stories o haciendo cualquier cosa por llamar su atención, porque eso al final solo empeora la situación y es una autentica perdida de tiempo y sinceramente.. ¿Tú tienes tiempo que perder? Ya te digo yo que no;

Cuando una relación no te hace sentir bien, te produce intranquilidad, desasosiego, ahí no es. Fuera dramas, no se trata de ser frio o de convertirse en alguien sin sentimientos a los que no le afecta nada, y hacer borrón y cuenta nueva, así de la nada, esa no es la cuestión, la cuestión es como siempre algo tan básico y tan olvidado como «El amor propio».
Claro que esa persona te importa, claro que estabas ilusionad@, incluso claro que la querías, pero ¿Te comprarías unas deportivas nuevas un numero más pequeño que el tuyo para escalar una montaña? Pues con las personas ocurre exactamente lo mismo. No te conviertas en ese yonki que busca su dosis y con poco que le den sacia su «mono», porque eso es exactamente lo que se produce en tu cerebro y te voy a explicar porqué.

Esta intermitencia afectiva crea una sensación de ansiedad en tu cerebro comparable a la de una adicción, y no, no te lo estás inventando, no, no es producto de tu imaginación, NO, lo estás pasando realmente mal, esto está perfectamente estudiado y testado. En 1950 B.F. Skinner realizó un experimento con palomas: cada vez que oprimieran un botón, les daría alimento. Por un tiempo, las palomas siguieron un patrón regular, hasta el momento que Skinner cambió el método: Únicamente les daría comida aleatoriamente cada vez que la paloma presionase el botón, es decir, una presionado el botón, a veces caía comida, otras veces no, otras veces el doble y así. La respuesta que obtuvo fue increíble. Lejos de dejar de hacerlo, las palomas oprimían el botón compulsivamente, si, en plan YONKI.
Con este ejemplo quiero que comprendas que, cuando no sabes cuando vas a recibir la respuesta o atención, porque esta es intermitente, es normal que sientas una sensación de desasosiego, porque además las personas que normalmente realizan este tipo de acciones, al comienzo de la relación suelen ser bastante atent@s y cariñosos, y es esa actitud la que precisamente provoca que tu cerebro cortocircuite.
¿Solución o quieres quedarte «cucu»?

La solución una vez más, la tienes en tu mano. ¿Es sencilla? Pues no, no es sencilla, pero si necesaria si no quieres seguir conviviendo con la angustia y la ansiedad: ELIGETE A TI.

No, en serio, no esperes a que nadie te elija, no esperes a que alguien te dedique tiempo y se digne a contestarte, a escribirte, a tratarte como su prioridad, no insistas en algo que desde un inicio ya hace aguas…Si es que además se nota, lo único que no hay más ciego que el que no quiere ver. ¿No crees que te mereces algo mejor? ¿No quieres compartir tus momentos con alguien que disfrute estando a tu lado y no le resulte un mundo contestarte a un WhatsApp? ¿De verdad me lo estás diciendo?
Si cambias tú, cambia tu vida, créeme y si no, prueba. No te conviertas en esa Paloma y vuela, vuela libre y primero quiérete tu para que jamás tengas que pulsar un botón a cambio de un poco de amor ❤
